Son invisibles a nuestra vista, pero están ahí durmiendo con nosotros, son los ácaros y chinches.
Los ácaros del polvo se almacenan en diversos lugares, pero principalmente en libros, peluches, alfombras, almohadas y colchones, e incluso en la ropa. Las chinches se esparcen con rapidez y es notoriamente muy difícil deshacerse de ellas, por lo que cuando usted descubre esos parásitos en su casa u oficina es normal sentirse agobiado.
Afortunadamente estos organismos tienen una verdadera debilidad: el calor.
Por resistentes que parezcan, lo único que necesita para matarlas es exponerlas al vapor a temperaturas de al menos 48°C.
Grupo Baluher de México S.A. de C.V. maneja los vaporizadores, ya que producen altas temperaturas de vapor, letal para las chinches, ácaros y sus huevecillos.